Catéter uso veterinario
Tamaños de catéteres Iv para animales
El acceso venoso periférico es la piedra angular del tratamiento del paciente de emergencia o en estado crítico. Los pacientes suelen necesitar un acceso venoso temporal para la administración de medicamentos, la reposición de líquidos y electrolitos o la transfusión de productos sanguíneos. Los medicamentos y los líquidos con osmolalidades de 600 mOsm o menos pueden administrarse de forma segura a través de una vena periférica.1 La selección del lugar de acceso depende de los vasos disponibles, del estado de los vasos y del paciente, del gasto y de la urgencia de la situación. El acceso vascular implica tradicionalmente la inserción de un catéter en la vena cefálica, safena o auricular; sin embargo, cualquier vaso visible es un candidato potencial para la cateterización. Se utilizan varias técnicas para insertar los catéteres, como la percutánea, los orificios de alivio y los cortes venosos.
Existe una variedad de catéteres disponibles en el mercado (Figura 61-1). La longitud y el calibre (diámetro) del catéter a utilizar dependen de la especie y el tamaño del paciente, las venas disponibles y su estado, y las necesidades del paciente.
Diferencia entre jelco y cánula
En la población del estudio, el 23,2% de los catéteres intravenosos (IV) retirados en respuesta a una lista de complicaciones clínicas definidas tenían un cultivo bacteriano positivo, lo que equivale al 39,6% de los perros inscritos. También se identificaron los factores asociados a la colonización de los catéteres intravenosos, así como las especies bacterianas colonizadoras.
La información relativa a la colonización bacteriana nosocomial de los catéteres IV es limitada en la literatura veterinaria. El objetivo principal de este estudio era determinar la incidencia de dicha colonización de catéteres intravenosos en perros a los que se les retiraron los catéteres como resultado de signos clínicos de flebitis, extravasación u obstrucción del catéter. Los autores también trataron de identificar los factores causales, así como el género y la especie de los microorganismos más comúnmente identificados.
Este estudio prospectivo de cohorte longitudinal utilizó perros de propiedad privada y se realizó en el Hospital Clínico Veterinario de la Universidad Alfonso X el Sabio de Madrid entre enero de 2015 y julio de 2015. Sólo se incluyeron en el estudio los perros que habían sido hospitalizados durante al menos 48 horas y que habían desarrollado complicaciones del cateterismo intravenoso, como se ha indicado anteriormente. Durante el periodo de estudio 182 casos cumplieron los criterios de inclusión, se excluyeron los pacientes hospitalizados durante menos de 48 horas y los pacientes agresivos.
Calibrador de catéter amarillo
Revisión por paresUrología y medicina renalObstrucción uretral en gatos machos8 de abril de 2016 | Edición: Mayo/Junio 2016Courtney BeiterRVT, VTS (Anestesia y Analgesia) | Centro Médico Veterinario de la Universidad Estatal de OhioCourtney trabaja en el Centro Médico Veterinario de la Universidad Estatal de Ohio en el departamento de Urgencias y Cuidados Críticos de Pequeños Animales. Se graduó en el Columbus State Community College en 2006 y obtuvo su VTS en Anestesia y Analgesia en 2005. Courtney tiene varias publicaciones en su haber. Le gusta pasar su tiempo libre con su marido y sus dos hijas.
Leer artículos escritos por Courtney BeiterLa obstrucción uretral es una emergencia que puede poner en peligro la vida. Los gatos machos son más propensos a la obstrucción que las gatas.1 Cuando la uretra se obstruye parcial o totalmente, la orina no puede salir de la vejiga, lo que provoca anomalías de fluidos, electrolitos y ácido-base.2 La obstrucción uretral felina es una afección relativamente común, que representa hasta el 10% de los casos de felinos que se presentan en las clínicas de referencia y de urgencias de pequeños animales.3,4
Kits de práctica de catéteres Iv veterinarios
Tanto en los animales pequeños como en los grandes, las fuerzas dañinas que se ejercen sobre la línea intravenosa son un hecho común que conduce a complicaciones intravenosas. Cuando estas complicaciones IV ocurren, el catéter IV debe ser reemplazado, y la medicación infundida frecuentemente se derrama en el suelo y tiene que ser reemplazada. Esto conlleva una pérdida de tiempo para los técnicos/enfermeros veterinarios, un desperdicio de suministros, un aumento del estrés para el paciente y un mayor coste para el cliente.
SafeBreak Vascular Vet es un dispositivo de separación activado por la fuerza. El dispositivo se instala entre el tubo largo de la bomba intravenosa y el catéter intravenoso del paciente. Cuando se aplican fuerzas perjudiciales a la línea intravenosa, SafeBreak Vascular Vet se separa para proteger al paciente y al catéter intravenoso periférico, como se muestra en la figura 1. En los seres humanos, SafeBreak Vascular ha sido autorizado por la FDA para ayudar a reducir las complicaciones mecánicas de las vías intravenosas periféricas que requieren la sustitución de las mismas.
En 2021, Lineus patrocinó un ensayo controlado aleatorio realizado en el Hospital de Enseñanza Veterinaria de la Universidad Estatal de Colorado con 367 caninos. El objetivo principal del estudio era comparar la tasa de complicaciones intravenosas entre los grupos de SafeBreak y de control. El estudio demostró que había una reducción estadísticamente significativa de las complicaciones de la VCI cuando se utilizaba SafeBreak, y el grupo de SafeBreak mostró una reducción del 65% de las complicaciones mecánicas periféricas de la VCI en comparación con el grupo de control (1). Los resultados de este estudio pueden verse en la Tabla 1. Un análisis financiero realizado en este estudio descubrió que, con un margen de beneficio estándar adecuado en cada SafeBreak, la clínica puede reducir el coste global de la atención al cliente y aumentar al mismo tiempo los beneficios generados por ese episodio de atención.